IVOOX

Emitimos en http://www.radioenlace.org/ (martes 19:00) y http://www.asaltomataradiorock.com// (miércoles, 16:00) . Los podcasts, siguen disponibles en nuestra página de Ivoox.

domingo, 30 de mayo de 2021

LISTAS NEGRAS Y OTROS MENESTERES

Armando de Castro se considera un proscrito. A sus años afirma que sus proyectos están en las listas negras de medios de comunicación que todos conocemos. Los voceras y plumillas más modestos siempre prestamos cierta atención a sus nuevas andanzas y a la energía que destila en el escenario, en el que sigue mostrando una actitud envidiable. El menor de los hermanos de Castro, que sustenta con sus notas y movimientos los conciertos de Barón Rojo, se atrevió en los últimos años a grabar nuevas canciones bajo el título de Armando Rock

Ahora, en formato de power trío, está probando suerte con Black List. Sí, habéis leído bien, el nombre del grupo se traduce como "lista negra", una símil que equivale a su autodefinición como marginal y al repertorio que desgrana compuesto de canciones poco conocidas de su etapa en Coz, de Barón Rojo y de su trayectoria en solitario con Armando Rock. La lista blanca la conforman grandes clásicos del rock y éxitos de hard de hace tres y cuatro décadas, un menú apto para frikis y amantes genuinos de la música en directo. 

El debut tuvo lugar en Specka, un local situado en el complejo de ocio y comercial cercano a la calle Orense, y comenzó a una hora prepandémica, pasadas las 9 de la noche, en virtud de las restricciones más relajadas estipuladas tras la extinción del estado de alarma. 

En esta nueva presentación en sociedad le acompañaban Paco Mayo (batería) y David Pérez (bajo y voz principal). Aportaron una base rítmica contundente y atronadora a los riffs, adornos y solos de su jefe, que, una vez más, lo dio todo sobre el pequeño escenario de Chamartín. 

Los registros vocales de David se amoldaron muy bien a los temas de Barón Rojo y Armando Rock y no desentonaron en otras versiones (en el repertorio se incluyó “Don’t Talk To Strangers”, del llorado Ronnie James Dio). A pesar de que el hombre fuerte de la banda es el propio Armando, al vocalista se le vio demasiado estático y atado al bajo, en parte porque dependía de un atril para leer las letras (suponemos que estos detalles se irán limando en futuras actuaciones). 

El concierto se abrió con Exorcismo, para después abordar uno de los temas más pegadizos de Armando Rock, “Juego de necios”. Un muestra de lo negro que fue el set list son las canciones interpretadas de la discografía de Barón Rojo, casi siempre ausentes en los repertorios de la legendaria banda (“Sombras en la noche”, “En tinieblas”, “Cansado de esperar”, “Todo me da igual” o “El precio del futuro”). Inútil fue la petición de un espectador, deseoso de escuchar “Concierto para ellos”. Poco espacio para la luz en la lista negra. 

El protagonista de la velada dejó rastro de otros proyectos suyos de versiones como “Crossroads” o I’m So Glad "(Cream) y no dejó la oportunidad de rescatar “El blues del crítico”, que representa su opinión actual sobre algunas vacas sagradas del universo mediático rockero. 

El extenso concierto terminó con bises reivindicativos de su anterior proyecto, Armando Rock, entre ellas el tema homónimo del grupo, además de “Impresiones” y “Campanas del invierno”. El guitarrista madrileño calienta motores de cara a los ¿últimos? planes de vuelo con Barón Rojo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario